Si nos gusta viajar y somos frikis, ¿cómo diablos no íbamos a visitar el Museo de la Patata Frita (o Frietmuseum)? Ni sabíamos que existía hasta que llegamos a Brujas. Y es que cuando nos personamos en su Oficina de Turismo, nada más bajarnos del tren desde Bruselas, preguntamos qué cosas serían interesantes para ver. Su Catedral de San Salvador, su Iglesia de Santa María, su Grote Markt, su Plaza Burg, su paseo por los canales… Y ya muy al final, como «esto no tiene que ver con nosotros», la chica nos mencionó ¡el Museo de la Patata Frita! «¿Cómo?». Pues eso, un espacio dedicado a uno de los emblemas de Bélgica después del chocolate. Con mucha curiosidad, ¡allá que nos fuimos! Leer más Sobre Museo de la Patata Frita: historia de su origen y lo friki que es …